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Mostrando entradas de abril, 2015

SOBRE ESPEJISMOS

A menudo mi vida es un gran espejismo con luces de neón.  Lo sé porque al tomar mi vaso y servirme cerveza, todo lo que me cae sobre los pies es arena.

DOS CONTRA UNO

Ni torciendo la boca, ni mandándome a casa vas a conseguirlo. Yo me quedo aquí, me quedo contigo, y si quieres salir, nos marchamos juntos, que si aparece uno de esos fantasmas tuyos, siempre será mejor  dos contra uno.

DESAPARECER

A ratos mi mirada resulta impasible, esquiva. Mis ganas de soledad, desconcertante, y la pelea interna regresa cuando personas importantes me expresan que quieren más de mí. Por mí, han gastado su paga del mes, han cocinado mi plato favorito y lo han vestido de acto fortuito después. Han adorado mi forma de reír, de pensar, mi pelo, y han rezado al santo  de hazlopormiestavez , que tras ese ruido al pisar emergiera mi figura. Me han querido callada. Y parlanchina. Exigieron mi amor porque en sus labios yo era lo mejor que les había ocurrido,  y así, mojando mis oídos con el manto salado de sus lágrimas acudí a millones de citas sin energía en mis zapatos, sin saber por qué había tomado ese tren dejando sobre la encimera el alimento del día. Durante años dije a todo que sí. Entregué mi tiempo y el timón de mi vida al otro y agradecí inocentemente tantísimo amor recibido. Me olvidé de mí, de que existo , ahogada por el amor que despertaba en ellos, un amor, que sentía, les

LOS LUNES AL SOL

Me aprieta el pantalón y tu ausencia. La báscula acabó por llamarme la atención recordándome que afuera pegaba el sol y que el azúcar no pudo ser jamás el sustitutivo del cuerpo nadie. Esto ya lo he vivido yo antes , me digo. Cada lunes amanezco en una nueva vida con planes alimenticios claros, disciplina y deporte, pero elevado el precinto del martes suelo sorprenderme agarrada a una cerveza o un paquete de dulces. Nadie nos avisó de que vivir era esto , un continuo ir y venir, un buscarse y por el camino, desprenderse de todo lo feo, tantas sonrisas falsas, tanta sinceridad mal procesada y unos jueces que desgraciadamente siempre se ponen del lado del mismo. Lo confieso, me enamoré de un chico muerto . Durante meses traté de hacerle entrar en razón. Le hablé de las maravillas que le esperaban fuera. Me quedé en los huesos de tanto ofrecerle mi energía y comida. Pero, ¿acaso es un pecado desear amar a alguien? Pelear un sueño está bien, pero hay que hacerse responsable de a cuá